El Estado de Israel es célebremente conocido por el extremo estado de vigilancia sobre su seguridad nacional. El acontecimiento más importante ocurrido en los últimos meses en pos de esta, ha sido la adquisición por parte de su Fuerza Aérea del F 35 norteamericano bajo el nombre hebreo de Adir.
El cambio en los Cazas
El F 35 Lightning II es el caza polivalente más moderno del arsenal estadounidense. Su nombre se deriva del P-38 Lightning, el bimotor que realizó proezas en la Segunda Guerra Mundial con su innovadora ingeniería. Este avión caza de quinta generación fue introducido oficialmente en el servicio el año pasado, luego de una extensa y costosisima campaña de producción y desarrollo que le valió sus grandes críticas.
La viabilidad del programa más de una vez se puso en jaque por las millonarias cifras que significaban sus costos, poniendo en cuestión si era conveniente desarrollar este nuevo proyecto o someter a modernización los aviones ya existentes en el servicio activo. Finalmente se dio luz verde, y la concesión de la producción del F 35 quedó en manos de Lockheed Martin Aircraft y Northrop Grumman luego de una intensa puja con Boeing.
Una de las particularidades del F 35 Lightning II es que fue diseñado en el marco del programa Joint Strike Fighter, es decir, fue pensado a fines del 2001 con el objetivo de aunar en una sola aeronave las cualidades de el F16 de la Fuerza Aérea, el F18 de la Marina, el AV 8B Harrier de despegue vertical del Cuerpo de Marines, y la capacidad de ataque aire-tierra/anti-tanques del conocido A-10 Warthog. Todas las cualidades del arsenal aéreo estadounidense concentrados en un solo aparato capaz de reemplazarlos definitivamente. Justamente, un “Joint Strike Fighter”, una aeronave capaz de afrontar todos los desafíos que conciernen a cada tipo de combate aéreo.
Las innovaciones en los paises
Con el lanzamiento de esta innovadora aeronave, países como EEUU, Gran Bretaña, Italia e Israel se hicieron con las primeras unidades mientras otros países como Canadá y Australia gestionan también su adquisición. La capacidad de enfrentar cualquier tipo de desafío lo ha transformado en una poderosa arma de disuasión, mostrando los dientes en Polonia y Japón frente a las tensiones entre EEUU con Rusia y Corea del Norte.
En este proceso de introducción del F 35 al escenario internacional, el Estado de Israel fue uno de los primeros que, si bien sus compañías no formaron parte de las concesiones o financiadoras del proyecto, se hizo de los primeros ejemplares de la aeronave para equipar a su Fuerza Aérea. El Estado de Israel históricamente considero la defensa de su espacio aéreo y la ventaja estratégica por sobre la aviación de sus vecinos como una cuestión de extrema seguridad nacional. La permanente modernización de sus aparatos le permitió tener un margen de ventaja por sobre las capacidades aeronáuticas de los países árabes que, en más de una ocasión le posibilitó la supervivencia.
Desde los 60s dominando los aires
Los F 4 Phantom despedazaron a la aviación egipcia durante la guerra del Yom Kippur de 1973. Los ya viejos IAI Kfir e IAI Nesher, nacidos en las eficientes operaciones de inteligencia industrial realizadas por el Mossad israelí a la compañía francesa Dassault que se abocaba a la producción del Mirage le permitió al Estado judío mantener la ventaja por sobre los MIG de los países árabes. Con el fortalecimiento de Saddam Hussein durante inicios de los años ‘80s, Israel se vio frente a un gran desafío. Debía guardar su seguridad frente a un Irak que se equipaba con los modernos MIG-29 rusos y vaticinaba en el horizonte la instalación de su reactor nuclear, “Osirak”, en el marco del plan Tamuz que podría llevar al líder baazista a desarrollar armas de destrucción masiva.
Si Israel no hubiese contado para aquel entonces con los modernos F 15, el primer ministro Menachem Begin jamás hubiese podido neutralizar con un fugaz ataque el reactor iraquí en el año 1981, para luego poder salir de Irak a salvo de los veloces MIG a través de Jordania.
Las consecuencias
El mencionado Primer Ministro del partido Likud celebró con júbilo tal operación, demostrandole a sus funcionarios la gran importancia de contar con una poderosa aviación de amplia capacidad operativa para guardar la seguridad del Estado judío. En los pilotos de la Fuerza Aérea Israelí descansaba la posibilidad de evitar el fortalecimiento de los vecinos árabes. Y para ello se debía contar siempre con los aviones más avanzados del arsenal aéreo internacional.
Hoy en día la política de mantener la ventaja estratégica por sobre los vecinos continúa más vigente que nunca. La versión más moderna de los F 16 israelíes están en el servicio activo desde hace más de doce años, y los F15 desde hace más de tres décadas. A pesar de que Siria, Irak o Egipto han cambiado su comportamiento hacia el Estado de Israel por una amplia diversidad de razones, el oriente medio ha visto el surgimiento de Irán como un factor clave en la dinámica regional.
La aviación rusa también está presente en el teatro de operaciones actuando con los viejos aviones que Israel conoció en sus pasadas guerras contra los árabes, pero también con los modernos SU 35 que suponen un gran desafío para el equilibrio en el control aéreo de la región.
Los F 35 de Israel
Benjamín Netanyahu, hombre procedente de la tradición militar y de la comunidad de inteligencia israelí, no toma estos temas a la ligera y continua con la línea de mantener la ventaja estratégica en el aire. Y es por esto que Israel es el primer país en adquirir el moderno F 35 Lightning II para su arsenal, bautizándolo como Adir.
Con el paso de las décadas, Israel va dando saltos significativos en la tecnología aeroespacial. La ventaja sobre los vecinos es el motor de su política de seguridad nacional, y aunque en el corriente año las administraciones de Tel Aviv afronten urgentes desafíos de otra naturaleza (el Hamas y Yihad Islámica, por ejemplo) la superioridad en el campo del espacio aéreo claramente no es un tema que esté fuera de discusión. Aún sigue siendo un pilar en la matriz de defensa israelí.
Aún son recurrentes para Israel las incursiones en profundidad sobre territorios vecinos para realizar operaciones de carácter anticipatorio frente al adversario. Por sus características geográficas y espaciales, el Estado judío muchas veces se ve obligado a tomar la iniciativa para evitar la consolidación efectiva de las amenazas. Para que este tipo de raids sean posibles, la superioridad técnica y una aviónica moderna son factores claves y decisivos.
Aquí es donde ahora se desempeñará el F 35 Adir, caza polivalente de quinta generación, el nuevo pájaro de la Fuerza Aérea Israelí.
Bibliografía:
- Hesi Carmel y Jaques Derogy: “Israel ultra-secreto”. Ed: Planeta. Barcelona, 1990.
- F 35 Ligthning II, Lockheed Martin Aircraft Oficial Website. Link: https://www.f35.com
- Lorch, Netanel: “Las guerras de Israel. Árabes contra judíos desde 1920”. Ed: Plaza y Janes. Barcelona, 1983.
0 respuestas en "Adir, las alas de Israel"