Por Carolina Riera
Tras 75 años de cooperación ininterrumpida entre Argentina e Israel, las relaciones entre ambos estados parecen ser actualmente más fuertes que nunca. La reciente colaboración en el campo tecnológico- productivo y en la gobernanza del agua, impulsada tanto por el gobierno nacional como por varios gobiernos provinciales, es un claro reflejo de la fortaleza del vínculo.
El año 2023 ha sido un hito histórico en las relaciones entre Argentina e Israel, marcando 75 años de intercambios económicos y comerciales ininterrumpidos. En este sentido, se puede afirmar, que este vínculo ha logrado trascender la diversidad política de ambos países y superar diversos obstáculos, como los atentados a la Embajada de Israel en 1992 y a la AMIA en 1994.
Además, un ejemplo claro de esta relación es el crecimiento de las exportaciones argentinas a Israel, que han aumentado de 366,4 millones de dólares en 2021 a 401,5 millones en 2022, y las importaciones que han pasado de 152 millones a 193,9 millones en el mismo periodo, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Sin embargo, la relación entre ambos países no solo se limita al comercio exterior. En los últimos años, se han desarrollado paulatinamente nuevos campos de cooperación, como la inteligencia artificial, la ciberseguridad, la economía del conocimiento y las industrias creativas argentinas, que han despertado un gran interés en la sociedad israelí.
No obstante, este artículo buscará analizar la creciente colaboración argentino-israelí en materia de gobernanza del agua. Y es importante destacar de este fenómeno, que no solo el gobierno nacional argentino es el que impulsa estas iniciativas, sino que también son los gobiernos provinciales quienes están buscando proactivamente impulsar dichos procesos de cooperación y financiamiento internacional.
Pensar en la gobernanza del agua y la colaboración con Israel
El cambio climático ha afectado profundamente a nuestro país en el último tiempo, con fuertes sequías y procesos de desertificación que podrían poner en riesgo la producción agropecuaria e industrial en los próximos años si no se adoptan políticas eficientes y efectivas para abordar este fenómeno.
Así, es en este creciente escenario crítico, que las provincias argentinas han encontrado un firme aliado en Israel para el abordamiento de esta problemática del manejo del agua, sobre la cual dicho país demuestra ya una extensa experiencia.
Hasta el momento, se puede afirmar que la colaboración se ha presentado principalmente a través de la transferencia de buenas prácticas y conocimientos técnicos en materia de gobernanza del agua. En este sentido, un hito trascendental de dicha alianza, fue la visita en abril de 2022 de una misión de cooperación científico tecnológica argentina , integrada por ministros y gobernadores, al Estado de Israel. La misma tenía como fin conocer más profundamente el modelo de gestión israelí para afrontar la crisis hídrica y potenciar acuerdos para el inicio de la elaboración de nuevo planes hídricos con la asesoría de la empresa israelí Merkot ( compañía nacional de agua de Israel y responsable de la planificación y gestión de los recursos hídricos en este país)
Es así como en febrero de 2023, se terminó de concretar el acuerdo con 5 provincias: Catamarca, Formosa, La Rioja, Río Negro y Santa Cruz, sumándose a dos acuerdos ya realizados previamente con San Juan y Mendoza en el mes de octubre.
Argentina e Israel frente al cambio climático y la seguridad alimentaria
Hasta el momento, es visible que Argentina se beneficia de esta estrecha cooperación, pero también es importante destacar el interés y las ventajas que Israel obtiene de este intercambio. La necesidad de garantizar la seguridad alimentaria en este país de Medio Oriente debido a la crisis climática es un factor clave que debe estar presente al efectuar un análisis de esta relación.
De acuerdo con las propias palabras del Embajador israelí en Argentina, Eyal Sela, “Argentina puede aportarnos más alimentos e Israel tecnología, que está presente en la vida cotidiana de todos los argentinos”…”Queremos comprar más productos a Argentina y aumentar las inversiones en tecnología. La intención es brindar soluciones que permitan más tecnología para pagar un costo menor de transporte. Para eso, hay que invertir para que la producción crezca en términos de calidad y eficiencia“.
Sin embargo, a esta política comercial y hasta con tinte geopolítico, no le faltan detractores y escépticos, que han criticado duramente los lineamientos adoptados.
En este sentido, un informe reciente de la Institución Shoresh para la Investigación Socioeconómica ha identificado que creciente dependencia de países como Argentina en la importación internacional de alimentos representa una amenaza para la seguridad alimentaria, ya que aumenta el riesgo de desabastecimiento en caso de interrupción del suministro de importaciones.
Asimismo, dicha amenaza, se cierne sobre un contexto de crecimiento acelerado de la tasa de natalidad en el país.
Argentina y el Medio Oriente, ¿un vínculo cada vez más cercano?
Finalmente, es importante mencionar, que Israel no es el único país de la región que busca estratégicamente fortalecer sus lazos de alianza con Argentina y sus respectivas provincias. Otros países de Medio Oriente, como Kuwait y Emiratos Árabes Unidos, también han iniciado un proceso de cooperación e intercambio más estrecho. Incluso en algunos ejemplos como el del Acueducto Bi provincial Córdoba- Santa Fe, estos países han presentado una gran disposición para el otorgamiento de préstamos con muy favorables condiciones de pago destinados a proyectos de infraestructura que busquen mejorar la tecnología agropecuaria, asegurando así la continuidad y eficiencia de la producción argentina.
La región de Oriente Medio se encuentra altamente vulnerable a los impactos del cambio climático, experimentando riesgos significativos como olas de calor extremo, sequías prolongadas e inseguridad alimentaria. Esta situación es especialmente preocupante, considerando que la región alberga a una población de 400 millones de habitantes.
En este sentido, Argentina, con su abundancia de materias primas y una fuerte producción agropecuaria, se posiciona como un socio estratégico para satisfacer la creciente demanda en Oriente Medio. Así, en un contexto económico tan desafiante como el actual, resulta crucial que el país aproveche estas oportunidades y diseñe políticas comerciales y de cooperación adecuadas para establecer una presencia destacada en la región.