Por Eduardo Femenía
El techno o tecno es un género de música electrónica que surgió en Detroit (Estados Unidos) y en Berlín (Alemania) hacia finales de los años 1980, exactamente el 5 de abril de 1988. La literatura anglosajona asume que la génesis del género se encuentra en el Detroit techno y en sus precursores, aunque ya se utilizaba con anterioridad en países como Alemania o España la denominación “Techno” para referirse de forma genérica a otros géneros de música electrónica.
Primer acercamiento y orígenes de los Clubes Techno de Berlin
Sisyphos, un emblema de la cultura techno y considerado por muchos el mejor lugar para los clubbers
El origen del techno proviene de la música house junto con la fusión de ciertas corrientes de música europea, basadas en el uso experimental del sintetizador o el primer electro. A esto se añade la influencia de una estética y temática de corte futurista, basada tanto en la ciencia ficción como en algunas ideas de la obra de Alvin Toffler.
El propio término techno deriva del concepto de techno rebels presente en el libro “La tercera ola” del sociólogo estadounidense. Esta combinación de ideas acerca el techno a un tipo de estética afro-futurista y cyberpunk.
La caída del Muro en 1989 no solo simbolizó la reunificación de Alemania, sino que también abrió las puertas a una explosión creativa en Berlín. En la década de 1990, la ciudad se convirtió en un refugio para artistas, músicos y creativos de todo el mundo, atraídos por la libertad y la posibilidad de explorar nuevas formas de expresión.
Los clubes techno emergieron como espacios clave en esta nueva era. Lugares como el Berghain, Sisyphos y Tresor se convirtieron en epicentros de la vida nocturna, donde la música electrónica y el techno se fusionaron con una filosofía de libertad y aceptación. Estos clubes no solo ofrecían una experiencia de fiesta, sino que también servían como refugios para comunidades diversas, incluidos LGBTQ+ y subculturas alternativas.
El ambiente post-reunificación, combinado con espacios industriales abandonados, proporcionó el escenario perfecto para la cultura del techno. La música se convirtió en un vehículo de resistencia y autodescubrimiento, simbolizando un nuevo comienzo para muchos. Hoy, Berlín sigue siendo reconocida mundialmente por su vibrante escena de clubes techno, que ha perdurado a pesar de los desafíos contemporáneos.
¿Qué está sucediendo en la escena de clubes de Berlín?
Berlín no solo es la capital de Alemania, sino que también se presenta como la capital cultural de Europa y un bastión del techno. Los clubes han hecho que Berlín sea atractivo. El hecho de que los clubes vengan y se vayan no es nada nuevo; es parte del cambio que vive una ciudad. Sin embargo, la cultura techno ha dejado una huella profunda en Berlín.
La desaparición de clubes en Berlín plantea preguntas sobre el impacto de esta pérdida en una ciudad conocida mundialmente por sus excesos hedonistas. ¿Qué pasará con los miles de turistas que vienen a Berlín por su cultura de fiestas única? ¿Y qué sucederá con los muchos creativos que viven aquí?
En 2020, el club Griesmühle tuvo que cerrar sus puertas, lo que refleja la situación de la cultura que tanto ha definido a la ciudad. Berlín es conocida internacionalmente como una ciudad que nunca duerme y donde el techno tiene profundas raíces, gracias a la amplia oferta de fiestas disponibles a cualquier hora. Sin embargo, esta situación puede cambiar en los próximos años, ya que la vida nocturna de Berlín enfrenta la amenaza del cierre de clubs.
Lamentablemente, hay varias razones para ello. Berlín ya no es la ciudad “pobre pero sexy”; ha perdido parte de su brillo. La importancia de la escena de clubes radica en que contribuye a la vida social y a la cohesión comunitaria, sirviendo también como espacios seguros para grupos marginados.
Berlín ha creado una singular paisajística de clubes y una filosofía cultural. El techno, en el pasado, simbolizaba libertad, autodescubrimiento, creatividad, y una ruptura con normas sociales y comerciales, así como con los roles de género. Los clubes techno atraen cada año a millones de turistas de todo el mundo que vienen a celebrar. Para muchos, las fiestas, que a veces duran varios días, representan libertad.
Los clubes son sinónimo de tolerancia y apertura; a menudo se dice que uno puede ser como quiera allí. La rica cultura de clubes y la oferta cultural de Berlín son reconocidas más allá de sus fronteras, formando parte de la identidad de la ciudad y de su atractivo.
Proyecto de la A100
El proyecto de la autopista A100 en Berlín amenaza con devastar culturalmente la zona de Friedrichshain. Esto se evidencia en la larga lista de proyectos amenazados: About Blank, Neue Zukunft, Oxi, Void, Villa Kuriosum, Club Ost, Else y, por último, pero no menos importante, Wilde Renate.
Si la A100 se expande como se planea, destruirá áreas verdes, parte de una escuela para personas con discapacidades físicas, carriles para bicicletas, un refugio para personas sin hogar, viviendas y jardines comunitarios. Pero no solo eso; también significará el cierre de seis clubes:
Wilde Renate, Oxi, Else, Void, About Blank y Club Ost.
El viernes, 13 de septiembre, se llevó a cabo por tercera vez la manifestación “A100 Wegbassen”, organizada por una amplia alianza de clubes, activistas climáticos y organizaciones sociales como la “Iniciativa ciudadana A100”.
Razones
La destrucción urbana, la aniquilación de barrios y la devastación cultural son problemáticas actuales. Puede que aún sea prematuro hablar de un gran cierre de clubes, pero este momento podría ser recordado como el comienzo del fin de una cultura de clubes diversa e inclusiva. Los problemas son diversos, pero todos comparten la falta de conceptos que puedan frenar este desarrollo.
El aumento de costos, la disminución de visitantes y la gentrificación son problemas destacados. Los mensajes positivos son la excepción. Los costos han aumentado, así como la inflación y el descontrol en los precios del alquiler, lo que ha llevado a una creciente comercialización. Si los clubes solo abren para un público exclusivo de turistas solventes o eventos corporativos, ya no se puede hablar de la cultura de clubes de Berlín.
Al final de la pandemia de COVID-19, se esperaba que la escena de clubes de Berlín recuperara rápidamente su esencia. Los turistas de fiesta regresarían, y la energía acumulada durante los confinamientos se liberaría en las pistas de baile, olvidando los problemas. Sin embargo, la realidad fue diferente. Recientemente, la Comisión de Clubes de Berlín ha constatado que la disminución media de visitantes en los clubes respecto a la época previa a la pandemia es del 20%. La mayoría de los locales de ocio se quejan de significativas caídas en sus ingresos y de costos operativos en aumento.
Desentrañando las razones socioeconómicas y culturales.
El factor económico de la cultura es a menudo subestimado en la capital. Sin embargo, la vida cultural, encabezada por los clubes, atrae a miles de turistas a Berlín mes tras mes. Por lo tanto, es responsabilidad de la política mantener viva esta cultura.
Se ha discutido la falta de responsabilidad política en la preservación de los clubes y espacios culturales. A pesar de que más personas asisten a teatros que a partidos de fútbol en Alemania, ambos sectores reciben subsidios directos e indirectos. Sería apropiado que se consideren las cifras de asistencia a los clubes y se exija al menos apoyo administrativo para su preservación.
En febrero, representantes del sector de clubes y cultura, del Senado y de la industria creativa se reunieron para debatir nuevos conceptos y soluciones sobre cómo mantener y crear espacios culturales en Berlín a largo plazo.
Razones Políticas
- Liberalización Cultural: La caída del Muro facilitó un entorno de liberalización cultural y social. Las nuevas políticas permitieron una mayor libertad de expresión y un espacio para el desarrollo de subculturas.
- Apoyo Institucional: En años posteriores, algunas iniciativas gubernamentales y del sector cultural comenzaron a reconocer el valor económico y social de la cultura de clubes, aunque muchas veces el apoyo ha sido insuficiente.
- Gentrificación y Desarrollo Urbano: La presión por la gentrificación en barrios clave ha llevado a un desmantelamiento gradual de espacios culturales. Las políticas de desarrollo urbano a menudo priorizan la construcción de viviendas y comercios en detrimento de los clubes.
- Regulación y Restricciones: A medida que la escena de clubes crecía, también lo hacían las regulaciones. Los clubes enfrentan requisitos legales y normativas de ruido que complican su operación y existencia.
Consecuencias Sociales
- Cohesión Social: Los clubes han funcionado como espacios seguros para diversas comunidades, fomentando la inclusión y la diversidad. Sirven como refugios para grupos marginados y como plataformas para la autoexpresión.
- Estilo de Vida Alternativo: La cultura techno ha influido en un estilo de vida alternativo que promueve la libertad personal, la creatividad y la experimentación. Esto ha dado lugar a una comunidad vibrante y unida en torno a valores de aceptación y tolerancia.
- Impacto Económico: La escena de clubes atrae a millones de turistas anualmente, contribuyendo significativamente a la economía local. Sin embargo, el cierre de clubes representa una pérdida económica y cultural para la ciudad.
- Desplazamiento Cultural: La gentrificación y el cierre de clubes han llevado a la desaparición de espacios donde se cultiva la cultura alternativa. Esto no solo afecta a los clubes, sino también a la identidad cultural de Berlín.
- Reacción y Activismo: Las amenazas a los clubes han desencadenado un fuerte activismo y movilización social. Manifestaciones y campañas de sensibilización han surgido para proteger estos espacios y la cultura que representan.
La cultura de clubes, en general, es digna de protección, ya que son lugares de encuentro con funciones socioculturales. En septiembre de 2024 se plantea una reforma del código de construcción, un paso que podría influir en la situación de los clubes.
Conclusión ¿Cómo puede crecer Berlín y, al mismo tiempo, proteger y desarrollar espacios creativos?
Para la cultura de clubes de Berlín, el cierre de cada uno de estos lugares representa una pérdida irreparable. Está claro que Berlín debe reinventarse para seguir siendo atractiva. Si Berlín desea mantener su estatus como metrópoli de clubes reconocida internacionalmente, en el futuro deben establecerse condiciones mejoradas, especialmente en lo que respecta al desarrollo urbano, la normativa de construcción y la protección contra emisiones.
El espacio fluvial como solución
El río Spree pertenece a todos. A través del río se pueden conectar espacios existentes y abrir nuevas áreas. Un servicio de transporte fluvial en el marco de la BVG (Berliner Verkehrsbetriebe, la principal empresa de transporte público de Berlín) podría ser una opción viable.
Fuentes:
- Die Techno-Kultur, Clubber und Raves in Berlin (entrevistas con Sophie Wettlaufer).
- La conferencia “Stadt nach acht”, -La complejidad de la situación de los clubes-.
- Programa de Arte “Tracks”.
- Talleres “Stadt essen Kultur auf”.
- Tobias Rapp en 2009 en “Berlín, Techno y el Easyjetset”.
- https://www.dw.com/es/cultura21-presente-y-futuro-del-tecno/video-67090507
- https://www.technomag.fr/es/la-cultura-tecno-de-berlin-en-el-punto-de-mira/#:~:text=El%20techno%20berlin%C3%A9s%20surgi%C3%B3%20en,sociedad%20autoritaria%20de%20la%20%C3%A9poca.
- https://www.katariandesmag.com/blog/berlin-techno-y-la-historia-detras-de-la-cultura-rave
- https://mixmaglatam.com/read/el-techno-berlines-patrimonio-cultural-de-la-unesco-news