Por Patricio Pagni Fernández
La razón inicial que motiva este artículo no es ni más ni menos, que el poder graficar el punto de conexión de los análisis y descripciones realizados en artículos anteriores entre las áreas de la seguridad y el desarrollo, principalmente en el ámbito de las relaciones internacionales. Para ello, recapitularemos sobre algunas ideas de artículos pasados y, presentaremos y desarrollaremos características de nuestro objetivo último que es presentar la seguridad humana, entendida como un eje transversal a dos mundos analíticos, históricamente separados, y muchas veces antagónicos. Como punto de partida para nuestro análisis, retomaremos la dinámica de securitización. Esta forma parte del giro lingüístico de la corriente constructivista de la seguridad, y se presenta mediante el origen de un discurso que se condiciona, forma y estructura en base a sentimientos y situaciones de lo que se percibe como “lo seguro”, entendiéndose a la securitización como un complejo acto de habla (Wæver, 1995).
Dinámica de Securitización: Un Análisis Constructivista.
Ubicándonos tempo-espacialmente en el periodo de los cambios de posguerra fría presentados en el área de seguridad, es que comenzamos, dentro de la securitización, a apreciar una real interacción entre esta área y otras como la justicia, libertad, paz y poder (W. B. Gallie). Dada dicha interacción, las corrientes revisionistas deepening and widening, junto a un nuevo enfoque a desarrollar, la seguridad humana, presentarán sus bases analítico-prácticas llamadas “freedom from fear” (libertad ante el miedo) como visión negativa/restringida y, por otro lado, “freedom from want” (libertad ante la necesidad) como visión positiva/amplia.
Es entonces que la securitización pasa a ser un punto de unión, configurándose como un programa político-normativo para la mejora de la realidad, no solo de la seguridad y la paz, sino también en el mundo del desarrollo y para la comunidad internacional en todos sus niveles. Estos programas, son mecanismos que comenzarán a ampliarse, conseguir conexión profunda y una mayor empleabilidad en agendas de seguridad locales (problemáticas de esferas sociales), de regionalización e internacionales, visiones de relacionamiento (amigo-enemigo), acciones medioambientales (“patrimonio común de la humanidad”) e incluso de salud (escenarios de pandemia).
Entre Seguridad y Desarrollo: Una Perspectiva Histórica.
Avances del surgimiento de la Seguridad Humana:
Década de 1960: Periodo de descolonización, deviniendo en nuevos estados que requieren satisfacer viejas y nuevas necesidades; en un principio resultaron situaciones de alcance local, pero con el paso de los años resultó ser un problema global. Aun sin tener un camino claro, es el periodo en que se concibe al desarrollo aún como sinónimo de crecimiento económico. Aparición de políticas de cooperación, con objetivo de desarrollo con fin económico, pero con una ampliación de objetivos y procedimientos.
Década de 1970: Periodo de grandes aportes económicos e institucionales de la mano de la CEPAL, donde Prebisch y su pensamiento cepalino proponen invertir la división internacional de trabajo para impedir la desvalorización de materias primas (y la proposición del sistema ISI). Comienza un periodo de tratamiento en el ámbito internacional de propuestas revisionistas de concepciones de desarrollo (por ejemplo, NOEI).
Década de 1980: Situación global de caos con la crisis del petróleo, múltiples gobiernos de facto, endeudamiento de financiación compulsivo (aplicación del Consenso de Washington). Se produce un cambio hacia el pensamiento crítico, que da predominio al enfoque de necesidades básicas, sacando el foco del mercado y poniéndolo en la sociedad.
Década de 1990: Fuertemente marcado por el fin del periodo conocido como guerra fría, donde, en este nuevo escenario ya no existe la posibilidad de un cambio hacia el bando comunista, por lo que el envío de dinero ya no es incentivo suficiente, generando un planteamiento de cambio en la guerra para el desarrollo, y una mutación del problema hacia la resolución de deudas, escenarios de inestabilidad, malestar social, entre otros. Gran incorporación de los programas de Ayuda Oficial para el Desarrollo (AOD) y Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) con sus primeros pasos sobre Índice de Desarrollo Humano junto al Producto Bruto Interno (IDH+PBI).
La Emergencia de la Seguridad Humana: Hacia una Visión Holística.
Con estos avances podemos ver que la implementación de la seguridad humana no es ni ha sido una tarea sencilla, ya que luego de semejante recorrido histórico, la literatura se vio en la necesidad de identificar de manera minuciosa preguntas como ¿hacia quién está dirigida?, ¿qué se está protegiendo?, ¿qué percibimos como amenaza? o ¿qué medios han de emplearse?
La seguridad humana entonces, nace a razón de que los fenómenos no militares, cada vez están ocupando un espacio más importante en el escenario internacional actual (medio ambiente, violación de DDHH, etc.). Este fenómeno comienza a surgir en la década de 1980, luego del periodo llamado “segunda guerra fría” (marcado por la invasión a Afganistán), como espacio propicio para la generación de escenarios de contrapunto a ella (Comisiones Brundtland y Brandt, Chernóbil, etc.), presentando nuevas dimensiones de seguridad, buscando abordar la seguridad en materia de fronteras, en materia de DDHH y otros aspectos como economía y medio ambiente, buscando en última instancia una visión más holística y dinámica. Esto último, desembocará en la necesidad de empezar a dar seguridad a otras cosas, sobre todo temas vinculados a desarrollo del estado y la seguridad compartida como concepto conciliador, comprendiendo como una máxima que, el futuro y el presente son ámbitos simultáneos y compartidos entre todos, con un foco claro en el individuo y al mismo tiempo abordado de manera multisectorial: economía, alimentario, sanitario, medioambiental, personal, comunitario y político.